Que la historia está escrita por hombres es algo innegable. De hecho, son infinitos los personajes femeninos que han quedado relegados al olvido en todas las disciplinas: arte, ciencia, tecnología, salud, ingeniería, etc. No obstante, también es innegable que desde hace unos años el cambio de paradigma en la sociedad ha provocado que revisitemos la historia y conozcamos muchas de esas figuras hasta ahora olvidadas.
Y es que, aunque no podemos obviar, por ejemplo, que Scott Fitzgerald fue un gran escritor, tampoco podemos olvidar que Zelda Fitzgerald fue mucho más que su musa; fue, de hecho, quién originó muchas de las ideas y personajes de las novelas más icónicas del escritor. De la misma manera, aunque fue Auguste Rodin quién pasó a la historia como uno de los mejores escultores de todos los tiempos, su obra “Galatea” está profundamente inspirada -dicho de forma elegante- en la escultura “Muchacha con gavilla”, de su coetánea Camille Claudel -infinitamente menos reconocida-. Como estos, son miles los casos de artistas y mujeres de todas las disciplinas cuyo nombre no ha trascendido con la misma relevancia que el de los hombres con quién compartían profesión.
En el campo de la arquitectura y el diseño son muchas las figuras femeninas que han sido obviadas o estudiadas en menor medida, pese a haber desafiado las normas en un mundo liderado por hombres. Mujeres que han dejado una huella indeleble y cuyo legado nos sigue inspirando en 022 estudio a día de hoy.
1. Iris Apfel
Socialité neoyorquina por excelencia, prescriptora de estilo, diseñadora de interiores y mujer incombustible, a sus 102 años y recientemente fallecida, Iris Apfel es una de las figuras más icónicas del mundo del diseño.
Aunque esta rara avis lleva trabajando en el diseño de interiores 70 años, fue en el 2005, que una exposición de su colección en el Metropolitan Museum de Nueva York redescubrió su hipnótico atractivo, cuando Apfel vivió una segunda explosión de reconocimiento y efervescencia mediática, firmando campañas para marcas como &Other Stories o M.A.C.
Su estilo, irreverente y ecléctico, la ha llevado a decorar y restaurar la residencia presidencial de nueve presidentes americanos, desde Harry Truman hasta Clinton. Entre sus clientes también se encuentran personajes como Greta Garbo o Estée Lauder. Y es que su capacidad para mezclar -en la moda y en el diseño de interiores- piezas exclusivas con tesoros escondidos en los mercadillos de la ciudad, la llevaron a convertirse en todo un icono de la élite neoyorkina.
A día de hoy, a sus 102 años sigue siendo icono de estilo y fuente de inspiración para diseñadores de todo el globo.
2. Zaha Hadid
Zaha Hadid, nacida en Bagdad en 1950, fue una arquitecta deconstructivista iraquí (aunque pasó la mayor parte de su vida en Reino Unido) de renombre internacional y una de las figuras más influyentes en la arquitectura contemporánea.
Premiada con numerosos reconocimientos, entre los que destacan el premio Pritzker de arquitectura en el año 2004 y la Medalla de Oro del RIBA (colegio de arquitectos británico) -siendo, en ambos galardones, la primera mujer en lograrlos-, su trabajo se caracterizó por el uso de curvas con múltiples puntos de perspectiva y geometría fragmentada, desafiando las convenciones arquitectónicas tradicionales y evocando el caos de la vida moderna.
Además de su imparable trayectoria arquitectónica, Zaha Hadid dedicó parte de su carrera a la docencia en la Escuela de Diseño de Harvard y en su alma máter, la Arquitectural Association, entre otras escuelas. También se dedicó al diseño de interiores y mobiliario -siendo su silla “Liquid Glacial” un notable ejemplo-, de coches, de una línea de ropa e, incluso, de zapatos.
Entre sus obras más reconocidas, destacan el Centro Cultural Heydar Aliyev, que se encuentra en Baku, la capital de Azerbaiyan; el Museo MAXXI en Roma; la Ópera de Guangzhou, situada en la ciudad homónima del sur de China y el Centro Acuático de Londres para los Juegos Olímpicos de 2012.
3. Gae Aulenti
Gae Aulenti fue una arquitecta y diseñadora italiana conocida por su trabajo en el diseño de interiores y arquitectura. Aunque llevó a cabo más de 700 proyectos, es relativamente desconocida fuera de su Italia natal.
No obstante, su carrera está plagada de hitos arquitectónicos. Entre sus contribuciones más destacadas se encuentran la transformación de la histórica estación de tren Gare d’Orsay en París en el Museo de Orsay y el diseño de las tiendas Olivetti. Pero también cabe mencionar, por su aportación y relevancia, el diseño de la silla plegable April para Autlenti -silla que aún se fabrica-, su serie de sofás y butacas de metal y cuerpo “Stringa” para Poltronova, sus lámparas Pipistrello y Ruspa para Martinelli y, por supuesto, su participación en la renovación y ampliación del Museo Nacional de Arte de Cataluña.
Su enfoque en la conservación del patrimonio arquitectónico y su habilidad para combinar elementos históricos con el diseño moderno la convirtieron en una figura influyente en la arquitectura adaptativa, cuyo legado aún resuena en muchos de los proyectos arquitectónicos y de diseño actuales.
4. Dorothy Draper
Dorothy Draper fue la gran dama de la decoración estadounidense del siglo pasado. Con su estilo osado, sofisticado y colorista y sus atrevidas combinaciones de colores y texturas, rompió los moldes de la alta sociedad americana del siglo XX. Pero, además, con la creación, en 1923 de la primera empresa de diseño de interiores, Dorothy Draper se convirtió en la pionera en profesionalizar el sector de su país.
De su estilo destaca el uso de espejos, de plantas grandes y las eclécticas combinaciones de colores, texturas y estampados.
De hecho, aunque su trayectoria comenzó decorando las casas de la alta sociedad neoyorkina, pronto se embarcó en proyectos más grandes como hoteles, restaurantes, tiendas, oficinas y hasta aviones. Entre sus obras destacan el Hotel Arrowhead Springs, muy cerca de Los Ángeles, con una glamurosa decoración que lo convirtió en el lugar de peregrinaje para las estrellas del cine o el The Greenbrier, en Virginia Occidental.
Su estilo, que se podría calificar como barroco moderno, sembró unos códigos estéticos aún vigentes que han convertido el “toque Draper” en motivo de inspiración para interioristas de todo el mundo.
5. Charlotte Perriand
Charlotte Perriand fue una diseñadora y arquitecta francesa que desafió las normas de género en el mundo del diseño. A contracorriente de una época que negaba a las mujeres su protagonismo en el diseño contemporáneo, Perriand fue una visionaria, cuyo legado cambió para siempre el interiorismo de nuestros hogares.
Trabajó en colaboración con figuras influyentes como Le Corbusier y Jean Prouvé y desempeñó un papel crucial en el diseño de muebles modernos y funcionales. De hecho, durante los diez años de colaboración con Le Corbusier, ella fue la encargada de vestir los espacios que creó el reconocido arquitecto.
Con un carácter inconformista y heterodoxo, Perriand encontraba la inspiración en objetos del todo inesperados, como la maquinaria de los coches de motor o las bicicletas que veía por las calles de París.
De la colaboración con Cassina -única firma autorizada a editar sus diseños- nació la Charlotte Perriand Collection en colaboración con su hija. Esta colección, en continua evolución y revisión bajo la batuta de Patricia Urquiola como directora creativa de la firma, capta la esencia de la creatividad en cada diseño, mejorándolo e introduciéndolo en el mundo actual, combinando pasado y presente.
Entre sus obras más reconocidas, destacan piezas icónicas, como la silla Chaise Longue Basculante, que todavía se considera una obra maestra del diseño, la Butaca Indochine o las Mesas Mexique.
Su enfoque en la funcionalidad y la simplicidad la convirtió en una figura destacada en el movimiento modernista y un referente para futuras generaciones de diseñadores.
Estas son solo cinco de las arquitectas y diseñadoras que cambiaron la historia y desafiaron todas las normas con su creatividad, innovación y valentía. Su legado perdura en los edificios, interiores y objetos que diseñaron y en la inspiración que, a día de hoy, nos siguen brindando y su contribución es un recordatorio de que el talento y la visión trascienden cualquier barrera en la búsqueda de la excelencia creativa.